Loading...
Loading...
Click here if you don’t see subscription options
EspañolLa Palabra
Juan Luis Calderón
Cuando empecé mi preparación para la primera comunión, siempre imaginé la eucaristía como el acontecimiento en el que Jesús se hacía pan, pero pan lechuguino. Porque así debía ser el Señor: hermoso a la vista, suave al tacto, tostado y crujiente, que se sintiera cómo se partía por nosotros.
EspañolLa Palabra
Juan Luis Calderón
No perdamos de vista que, si Dios nos ama, no es porque no le queda más remedio, sino porque elige amarnos y amarnos mucho, hasta el extremo.
EspañolLa Palabra
Juan Luis Calderón
La venida del Espíritu Santo no fue un hecho aislado, ni un supermilagro cúralotodo, sino un proceso. Las conversiones de un minuto a otro son poco menos que imposibles. Es como dar velocidad a un carro; se puede hacer más rápido o más lento, pero no sucede ir de cero a cien en un momento. Hasta la Historia de la Salvación necesitó siglos.
EspañolLa Palabra
Juan Luis Calderón
Cuando san Pedro nos dice que compartamos los sufrimientos de Cristo no es para sufrir más de lo que nos toca, sino para estar en solidaridad y comunión con Aquel que no dudó en padecer con los que encontró.
EspañolLa Palabra
Juan Luis Calderón
El Espíritu Santo fue la buena respuesta que Dios dio a esos apóstoles aterrorizados antes la perspectiva de quedarse de nuevo solos.
EspañolLa Palabra
Juan Luis Calderón
La próxima vez que ore por alguien o que le pidan oración, atrévase a romper la barrera física e imponga las manos.